¿Cuánto cuesta un mono de mascota?
CIUDAD DE MÉXICO. Para ser dueño de un mono capuchino no se necesita viajar a América Central, basta tener ocho mil pesos, dar un par de clicks en Mercado Libre y hacer la compra o, bien, adquirirlo en Facebook o directamente en Tepito, pues teniendo los recursos es fácil de adquirir.
¿Cuánto cuesta el permiso para tener un mono capuchino?
“¿Me das el certificado del animal?”, se le revira. Asegura que “por Semarnat no hay problema, no necesitas el permiso. El mono capuchino te cuesta 25 (mil), para entregar en tres días”.
¿Qué tipo de monos se pueden tener en casa?
Entre las más conocidas, encontramos los chimpancés, los gorilas, los monos titís y los orangutanes. La exótica belleza de estas especies y sus similitudes físicas y comportamentales con los seres humanos hacen con que mucha gente quiera adoptar a un mono como mascota y criarlo en cautiverio.
¿Cómo se protegen los monos?
En la actualidad, los monos se encuentran protegidos por el convenio CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres), una convención creada por la ONU para regular el comercio y combatir el tráfico ilegal de animales.
¿Qué son los monos y para qué sirven?
Los monos son animales silvestres que están adaptados a vivir en la naturaleza, donde encuentran las condiciones óptimas para su desarrollo físico, cognitivo, emocional y social. Además, la crianza en cautiverio de algunas especies de monos está legalmente prohibida en muchos países para combatir el tráfico de mascotas exóticas.
¿Qué enfermedades transmiten los monos?
Los monos (principalmente aquellos de procedencia desconocida) pueden trasmitirnos ciertas enfermedades zoonóticas, como rabia, tuberculosis, herpes, hepatitis B y candidiasis, por medio de mordeduras o arañazos. Las zoonosis son aquellas patologías que pueden ser transmitidas entre distintas especies.
¿Cuáles son las colas de los monos?
Los monos se caracterizan por poseer colas, ya sean estas largas, cortas o diminutas, que les permiten mantener el equilibrio y a veces, funcionar como una extremidad. El único caso a considerar es el del gibón, un primate del mismo grupo de los gorilas y los seres humanos, pero al que coloquialmente se considera “mono”.